Por Rosalío Martínez Blancas

“Las interrupciones del servicio del Metro con retraso de 4 minutos se dispararon al pasar de 13,760 en 2013 a 28,347 en 2018 con un tiempo total de retraso de 55,380 minutos en 2013 y 113,388 minutos en 2018, es decir, se perdieron 923 horas en 2013 y 1,889 horas en 2018”, refirió el ex diputado Cuauhtémoc Velasco Oliva durante la presentación de su libro “Historia de una infamia y otras infamias. A cinco años de distancia”.

“El Metro vive un momento crítico. Es indispensable otorgarle mayor presupuesto, pero sobre todo cambiar la política que condiciona su operación. Requiere que se considere prioritario atenderlo revalorando su papel en el desarrollo urbano de nuestra Urbe y Zona Metropolitana”, resaltó.

“Pero también a la luz de las necesidades de movilidad brindarse al transporte de sus millones de usuarios, que sufren todos los días demoras, aglomeraciones, empujones, y todo tipo de incomodidades”, apuntó Cuauhtémoc Velasco.

Refirió que el pasado 7 de marzo la actual directora del Sistema de Transporte Colectivo (Metro), ingeniero Florencia Serranía –señalo- que sus instalaciones están en “condiciones deplorables” y su mantenimiento ha sido pésimo, a lo que se añadió un problema de corrupción generalizada, ya que su administración ha detectado contratos innecesarios, proveedores improvisados, omisión y rapiña. Al Metro, subrayó, se lo ha comido la corrupción.

El ex integrante de la Comisión Especial de Investigación de la Línea 12 del Metro de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Velasco Oliva aseveró que en 2018 la fiabilidad del Metro se desplomó por ineficiencia del mantenimiento, lo que provocó el disparo de las interrupciones del servicio, lo que también se refleja en las constantes fallas ocurridas en los últimos cuatro meses.

“En 2018 el mantenimiento se relegó en aras de otras necesidades, pero también como lo apuntó la ingeniero Serranía, lo devoró la corrupción generalizada”, recalcó.

“El Metro no logró cumplir todos los compromisos que asumió al incrementarse el precio del boleto de 3 a 5 pesos. Están pendientes la reparación y compra de trenes, así como de otras instalaciones eléctricas y la renovación de su cableado en tres estaciones. Así como la modernización de instalaciones de estaciones y por sí fuera poco su presupuesto se redujo 1,500 millones de pesos para 2019”, concluyó.