Por Francisco Javier Hernández

En tiempos en los que los mexicanos vivimos un estado de crispación social, como se reconoce en los mismos círculos del poder político, pareciera que todo señalamiento que se hace  a las omisiones  de los tres niveles de gobierno tuvieran la intención de “desestabilizar”, por lo que  es importante resaltar que no existe ese estado de animo  nada mas por la desaparición forzada de los estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, sino por la larga de pendientes que se tienen sobre todo en la parte social.

Es cierto, Enrique Peña Nieto no es responsable directo de la desaparición y probable asesinato de los 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, pero si de un gobierno omiso y al que se le ha acusado de “administrar” esta tragedia, pero también de acciones que muestran la soberbia de un Estado que habla de la desigualdad social y que mantiene buena cantidad de pendientes que ha originado la desesperación e  irritación de una sociedad que muestra su hartazgo en actos que parecen hasta deslenables.

Y es que desde los hechos ocurridos el pasado 26 de septiembre –cuando fueron atacados los normalistas por tratar de interrumpir el acto en la que la esposa del alcalde de Iguala rendía su informe como presidenta del DIF de esa localidad, en Guerrero--, el Estado y con todo su aparato de inteligencia y seguridad no ha podido comprobar que los restos encontrados en el famoso basurero de Cocula, pertenezcan a los desaparecidos.

Además se tiene la presunción de que las distintas brigadas que se han Integrado  para la búsqueda en otros sitios cercanos al lugar de los hechos, pareciera que se les ha llevado por caminos equivocados con el fin de ganar tiempo, pero esto ya ha ido tan lejos que aún cuando ya se cumplen los dos meses,  la irritación social no cede y al contrario pareciera que crece como se ha demostrado en las seis movilizaciones que se han realizado, incluyendo la del pasado 20 noviembre, con la exigencia de justicia y la  aparición de los estudiantes victimas de desaparición forzosa.

Por cierto, en la fecha en la debió haberse celebrado un aniversario más del inicio de la Revolución Mexicana, por el  contrario, sirvió de marco para que una vez más se mostrara la protesta social no sólo en la capital de la República, sino en diversas ciudades del país y hasta en otras latitudes del mundo.

Y es que aún cuando dejemos de lado las fuertes declaraciones del padre Alejandro Solalinde con respecto a que los jóvenes fueron masacrados y algunos quemados vivos por las fuerzas policiacas o bien los grupos delincuenciales, el mismo procurador de la República, pareciera que ya se hizo “bolas” con ese grave asunto.

Pero además de que si se trato de un cálculo político para dañar más aún la imagen del Partido de la Revolución Democrática –pues ese daño ya estaba hecha desde que los “chuchos” tomaron el control de este partido y cuando se firmó el “Pacto por México”— quizá con la malsana idea de recuperar el estado de Guerrero  para el PRI, la verdad es tal cálculo ya rebasó los límites y por lo pronto no se sabe quién será el verdadero ganón en esta rebatinga.

Y es que al interior del PRD ya se tiene conciencia de la crisis por la que atraviesa, a tal grado que su dirigente nacional Carlos Navarrete ha aceptado las críticas del líder moral de ese partido, Cuauhtémoc Cárdenas con quien incluso ha aceptado “dialogar”, frente a los medios, para revisar su permanencia frente a este instituto político.

Lo peor de todo es que justo cuando el país está en esta crisis aparece lo de la mansión de casi 85 millones de pesos que tiene o tenía en propiedad la esposa de Peña Nieto, la ex actriz, Angélica Rivera y que la conserja popular ha denominado la “casa blanca” y que presuntamente había adquirido a una inmobiliaria propiedad de Juan Armando Hinojosa, constructor de diversa obras en el estado de México, cuando era gobernador de esa entidad el ahora titular del Poder Ejecutivo.

Cierto, Angélica Rivera después de explicar cómo adquirió esta propiedad –con el producto de su trabajo en Televisa—ha decidido deshacerse de la misma, aunque la sospecha ha quedado.

Y quizá por esos hechos y más, Peña Nieto ha endurecido su discurso, a grado tal que ha deslizado la idea de que ahora sí, “se utilizará la fuerza del Estado” para evitar actos violentos perpetrados por aquellos que pretenden la “desestabilización” del país, un discurso no muy lejano al que Gustavo Díaz Ordaz expresará en Septiembre de 1968, días antes de que se perpetrara la matanza del 2 de Octubre, cuando se veía una “conjura” contra México.

Mientras tanto, también se tiene la sospecha de que la detención de once estudiantes por su posible participación en los hechos violentos en las inmediaciones de Palacio Nacional traía consigna, pues una vez más se asegura que los detenidos no formaban parte de dicho grupo y si se sabe que dichos provocadores fueron llevados en un camión del cual bajaron justamente para provocar tales desmanes y no se les detuvo “infranganti”, como debiera ser.

Por otro lado, vemos que después de seis mesas de negociaciones pareciera que ya se está cerca el paro en el Instituto Politécnico nacional luego de la nominación de Enrique Fernández Fassnacht a quien en principio se le vio con recelo, aunque habría que reconocer que los estudiantes politécnicos ha actuado con inteligencia y sensatez no así los representantes gubernamentales, como se ha podido observar en las trasmisiones que realiza puntualmente el Canal once.

Y es que si la situación es difícil en el IPN incluso para sus profesores—muchos de los cuales llevan hasta 20 años de antigüedad con pocas horas de nombramiento—esto pareciera un mal generalizado con el presunto congelamiento de plazas, lo cual alcanza hasta los que pertenecen a la Dirección General de Educación Tecnológica Industrial, en donde se pretende que con la plantilla existente se pretende cubrir los huecos dejados por los que han decidido apresurar su jubilación.

Retiro  que por cierto ha sido decidid por una buena cantidad de mentores ante la incertidumbre que pareciera ¿ depara el futuro del magisterio en general, y no solamente porque se pretende examinar su quehacer frente a grupo, sino por la encrucijada que representa tener un alto número de alumnos reprobados por su falta de actitud para aprender, o bien tenerlos que pasar con calificaciones mínimas aunque ello vaya en detrimento de la calidad educativa.

Y por otro lado, aunque pareciera fuera de contexto, extraña esa intensa campaña engañosa y simplista del llamado Partido Verde Ecologista que hasta en las salas de cine se proyecta, por lo que muchos nos preguntamos de dónde sale tanto presupuesto y quién paga, porque ni siquiera el partido oficial hace gala de gasto tan oneroso.

SUBIENDO Y BAJANDO (ELEVADOR MEXIQUENSE)

 Y SI DE gasto hablamos, vaya que presupuesto parece  se le ha otorgado una vez más el gobierno del estado de México que encabeza Eruviel Ávila Villegas de poco más de 200 mil pesos para el 2015 por parte del Congreso Local que ojalá, se dice en algunos pasillos corrillos políticos sirva para reforzar la economía de buena parte de los 125 municipios que al parecer no tienen lo suficiente ni para reparar los enormes baches que lucen en calles y avenidas principales como es el caso de Naucalpan, que frente a palacio municipal se instaló una carpa para demandar solución a este problema y que se sabe fue desalojado de manera arbitraria…ELLO SEGURAMENTE TRAERA un nuevo conflicto al alcalde del lugar, David Sánchez Guevara y que seguramente traerá sus consecuencias en los comicios del año venidero, aunque parece que todo está “fríamente calculado”, será?

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