Agustín Vargas (*)

Vaya madruguete que les dio Banxico, que preside Agustín Carstens, a bancos, sofomes, sofipos y todo aquél intermediario financiero cuyos créditos se “amarran” a un seguro, léase hipotecario y automotriz principalmente, para amparar los bienes mientras son financiados para su adquisición.

Resulta que, de acuerdo con la circular 9/2015, publicada en el Diario Oficial de la Federación, se modifica la metodología para calcular el Costo Anual Total (CAT) de los créditos, por lo que a partir de octubre de este año deberán incluir en éste los costos de los seguros.

Obviamente banqueros y financieros pusieron cara de ¡¿what?! cuando leyeron tal disposición.

En primer lugar están sorprendidos porque no les fue consultado en absoluto y en segundo consideran que lejos de fomentar el crédito, puede inhibirlo debido a que se incrementaría el CAT significativamente, según ellos, de manera artificial.

Además aseguran que el servicio de los seguros normalmente es otorgado por compañías aseguradoras ajenas a los bancos o intermediarios otorgantes de los financiamientos.

En el crédito automotriz, señalan, se convertiría en un verdadero galimatías puesto que al ser contratados se ofrece, también por disposición oficial, varios seguros de diferentes empresas para que el cliente escoja el que más le convenga, y las coberturas difieren de acuerdo al grado de siniestralidad de cada estado, ciudad, municipio o delegación.

Hay financieras, como la arrendadora de Toyota, que solicitan pagar el seguro no cada año sino por el total del plazo contratado, ¿se imaginan a cuánto subiría el CAT?

Se calcula que la mitad de los autos que se venden en el mercado interno es a través de un crédito, obviamente los CAT’s se elevarán por lo que temen que ello espante a la clientela y se desvíen a esquemas de adquisición informales o de abuso como son los autofinanciamientos.

Por último, banqueros y financieros comentan en broma: “¿pues qué no todo era miel sobre hojuelas en la convención bancaria?, si estábamos chupando tranquilos”. 

Obviamente solicitarán la intervención de la Secretaría de Hacienda y  Crédito Público, a cargo de Luis Videgaray, y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores de Jaime González Aguadé, para que Banxico “recapacite” al respecto.

Juicios hipotecarios, al ámbito federal

Lo que si causó buena impresión entre la comunidad financiera, fue la reciente reforma en materia hipotecaria que la Cámara de Diputados aprobó para que, en lo sucesivo, a los juicios en materia hipotecaria se les aplique la legislación federal y permita destrabar los procesos judiciales y hacer efectiva la garantía cuando se caiga en mora o, simplemente se deje de pagar un crédito.

Se trata de juicios hipotecarios que involucran a los organismos nacionales de vivienda, mismos que se desahogarán mediante el ejercicio de la acción por la vía civil federal, con el fin de tener certeza en el desahogo de los mismos. Sin embargo, hay que recordar que en una buena cantidad de créditos y juicios hay recursos privados, o sea de la banca y de instituciones financieras no bancarias, principalmente sofomes, mediante la figura del cofinanciamiento.

Viejo anhelo del sector bancario que desde que estalló la crisis bancaria en 1998, solicitó reformas y más reformas a la legislación mercantil para acelerar los juicios hipotecarios y recuperar garantías. Recordamos perfectamente, una de esas demandas era aplicar la legislación federal a los juicios hipotecarios, lo que por fin les concedió la Cámara de Diputados. Tarde, pero su solicitud se atendió.

Para tal efecto, el pasado 30 de abril la Cámara de Diputados reformó diversas disposiciones del  Código Federal de Procedimientos Civiles, de la Ley del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores y de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación en materia de juicios hipotecarios.

El dictamen, que adiciona un segundo párrafo a la fracción III del artículo 322 y reforma el 379 del Código Federal de Procedimientos Civiles, tiene como propósito establecer el ejercicio de la acción por la vía civil federal.

De igual forma, plantea que para el caso del impago de créditos de viviendas deshabitadas, los organismos nacionales encargados de financiar dichas viviendas se puedan constituir, de manera precautoria, como depositarios de las mismas durante el juicio.

El objetivo, según la argumentación de varios diputados, es evitar el deterioro, la depreciación, los riesgos de vandalización e invasión, así como la afectación al valor comercial de los restos de las viviendas que forman parte, inclusive, del mismo conjunto habitacional. 

Y no es para menos, ya que en los últimos años diversos factores han incidido en la recuperación de activos para mantener y sostener sanamente los fondos de vivienda entre ellos, y así lo reconocen los legisladores, destacan las dificultades legales para lograr el resarcimiento oportuno de las garantías constituidas en los créditos otorgados.

Infonavit será depositario

El caso del Infonavit es el más emblemático en esta reforma, por ser el principal organismo financiero en materia hipotecaria, no sólo de México, sino de America Latina.

Con los cambios legislativas, el instituto a cargo de Alejandro Murat Hinojosa, las casas abandonas serán reasignadas una vez reparadas a quienes más las necesiten, puestas al mercado nuevamente, ya que se estima se recuperarán de forma más expedita y bajo ciertas características o causales.

Entre los argumentos por los que podrán ser tomadas está el hecho de que él o los dueños de la vivienda abandonada hayan caído en impago del crédito o cuando sin autorización del Instituto; los deudores enajenen, incluida la permuta, o graven su vivienda e igualmente cuando se hayan agotado las alternativas de cobranza social. Se deberá acreditar debidamente que la vivienda se encuentra deshabitada.

El juez podrá decretar como medida precautoria que los organismos nacionales encargados de financiar programas de vivienda sean depositarios de la vivienda deshabitada para su conservación e integridad y evitar así el deterioro del bien objeto de la controversia. Para tal efecto, el actuario judicial hará constar el estado de la vivienda. 

Tratándose de créditos otorgados por el Instituto, éstos se darán por cancelados y el contrato será rescindido, bajo las mencionadas causales.

Televisa y Grupo Carso, otra vez de la mano

Luego de una separación de cuatro años, Grupo Carso y Televisa reanudaron sus acuerdos comerciales de publicidad en televisión abierta. La razón: ambos consorcios enfrentan en la actualidad la mayor competencia en sus respectivos negocios, lo que los obligó, sin duda, a aliarse de nueva cuenta.

El pasado jueves se dio un anuncio muy importante cuando el Instituto Federal de Telecomunicaciones dio el visto bueno a AT&T, compañía presidida a nivel global por Randall Stephenson, para la adquisición de Nextel, aunado a que previamente hizo lo propio con Iusacell. AT&T inicia sus operaciones en México una de las mayores empresas de telecomunicaciones a nivel mundial.

Algunas analistas refieren que la entrada de este nuevo jugador es posiblemente la causa por la cual se reactivó la asociación comercial publicitaria entre Televisa y Grupo Carso aunado a ello, en los últimos dos años la televisora se ha visto afectada en sus ventas por restricciones a los anuncios de alimentos con alto contenido calórico.

Si bien por parte de Grupo Carso ve a Televisa como una gran ventana para lanzar su publicidad, Televisa por su parte se encuentra muy unida con AT&T, quienes poseen el 49 por ciento de Sky.

A decir de especialistas, AT&T, por su tamaño, tiene el músculo para competir y cambiar la forma de ofrecer telefonía en México. Será la primera vez que América Móvil tenga una competición en México.