En aras de la transparencia y la rendición de cuentas, la Comisión Permanente del Congreso de la Ciudad de México aprobó un punto de acuerdo por medio del cual se exhorta a la Contraloría General y a la Auditoría Superior, ambas de la Ciudad de México, lleven a cabo una revisión de la ejecución y gastos de las obras de remodelación del edificio sede de la alcaldía de Milpa Alta, así como de la explanada, plaza cívica y mercado de San Pablo Oztotepec.
La plenaria solicitó a ambas instancias que los resultados de dicha revisión sean remitidos al Legislativo local, porque “existen dudas manifiestas con relación a diversos rubros como lo son nombre del contratista, datos sobre la naturaleza jurídica de la empresa constructora y si esta se encuentra en la lista de proveedores y servicios”, argumentaron los autores del mencionado punto de acuerdo, Fernando José Aboitiz Saro, de Encuentro Social, y María Guadalupe Chavira de la Rosa, de Morena.
Los legisladores también pidieron informes sobre el alcance del contrato contraído con el titular de la alcaldía de Milpa Alta, José Octavio Rivero, los montos comprometidos y los avances en la ejecución de las obras. “Creemos que el ejercicio del presupuesto de cualquier ente gubernamental, debe ser transparente y racional, más aún si tomamos en cuenta que el país y nuestra Ciudad se acogen a principios de austeridad”.
En los considerandos de su solicitud, los legisladores expusieron que una de las tareas más importantes del Congreso local es la fiscalización y control, amén de sus facultades de representación y de gestión.
Durante la sesión de Comisión Permanente, el diputado Aboitiz Saro manifestó que los representantes populares, en el ejercicio de sus facultades constitucionales, deben contribuir a la claridad y conocer, mediante una revisión del órgano de control de la Ciudad y el de fiscalización, sobre el uso y destino de los recursos públicos.
En el derecho parlamentario se le denomina “el poder de vigilancia del bolsillo”, añadió el legislador.