No existe posibilidad de descarrilamiento en el tramo subterráneo de la Línea 12, como sí lo existía en la zona del trazo elevado, aseguró el jefe de Gobierno del Distrito Federal (GDF), Miguel Ángel Mancera, en respuesta a las declaraciones del líder sindical del Metro, Fernando Espino.
En conferencia de prensa, Mancera Espinosa aseveró que siempre ha existido contacto con los integrantes del Sindicato Nacional de Trabajadores del Metro, por lo que adelantó que sus integrantes serán incluidos en diversas áreas de trabajo en la Línea 12. Esto, luego de que Fernando Espino detalló que han recurrido a instancias legales para poder realizar labores de mantenimiento en la llamada Línea Dorada ante la negativa de Joel Ortega, director general del Metro.
“Es muy seguro que ellos se incorporen a algunos de los trabajos que se van a venir realizando, ya sea en la parte de mantenimiento o en otras de las líneas de acción”, declaró el titular del Gobierno capitalino.
Pese a que agregó que se revisarán los datos presentados por Espino Arévalo, y que llevaron a la conclusión de un grave riesgo de descarrilamiento, descalificó los mismos al afirmar que ninguna de las diferentes empresas que participan de la “restauración” de la Línea ha llegado a una conclusión similar. Por el contrario, continuó, “nos dicen los expertos que está operativa y que está operando con seguridad”.
“Está garantizada la seguridad de todas y cada una de las personas que utilizan la Línea 12. Está garantizada, estamos nosotros dando puntual seguimiento a toda la operación de la Línea y estamos dando puntual seguimiento a la restauración en la parte elevada que más o menos se va ocupar un tramo de siete kilómetros de nueva vía, de nueva funcionalidad tanto en el carril de oriente-poniente como de poniente-oriente”, abundó el titular del GDF.
Finalmente, hizo énfasis en que el tramo elevado volverá a dar servicio en noviembre próximo, más de año y medio después de haber sido cerrado por lo que él mismo aceptó como “una posibilidad de descarrilamiento”. |