Luis Alberto Alonso   @ikaro_46

Hay investigaciones iniciadas por el supuesto conflicto de intereses en que incurrió el extitular de la Secretaría de Obras, pero Mancera da a entender que el mismo Alfredo Hernández debió excusarse de su puesto al tener conocimiento de las labores de su esposa e infiere la imposibilidad de que éste vuelva al cargo, pues cuando algo no funciona de manera adecuada “tienes que cortarlo de raíz”.

Casi a la media noche del pasado 11 de marzo se hizo del conocimiento público la separación de Alfredo Hernández como titular de la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse) ante un posible conflicto de intereses. En el mismo, se establecía que las Contraloría y la Fiscalía para la Investigación de Delitos Cometidos por Servidores Públicos, adscrita a la Procuraduría General de Justicia (PGJ), ya habían iniciado las indagatorias correspondientes.

Este viernes, el jefe de Gobierno del Distrito Federal (GDF), Miguel Ángel Mancera, precisó que “no es exacta la información, pero nosotros no podemos estar en duda de sí o no (se puede establecer culpabilidad) y por eso es que pedimos que se separara del cargo”.

Lo anterior, dado que, como precisamos en este espacio, que Érika Molina Barragán, esposa del extitular de la Sobse, no figura en el directorio oficial de Planet Ingeniería, pero el personal de la empresa la identifica como Directora Comercial de la misma.

Añadido a esta problemática se encuentra el historial de incumplimiento de contrato por parte de la empresa en cuestión, que incluso se encuentra en la lista negra del mismo Gobierno capitalino.

“El conflicto de intereses es algo que se puede presentar en el momento mismo en que a sabiendas de que hay una persona que puede tener un vínculo, pues esté relacionado con alguna empresa o con un tipo de actividad que resulte beneficiada. Me parece que eso es algo que en la propia impartición de justicia sucede cuando se excusan por ejemplo, ¿no? Cuando tienes un asunto que ya conociste y después llega a revisión, pues hay que excusarse de conocerlo por un posible conflicto de intereses, aquí sucede lo mismo (sic)”, expresó Mancera al respecto.

Pese a que el ejercicio de transparencia que se llevó a cabo recientemente por parte del gabinete del GDF fue catalogado de mediocre y se pedía un mayor alcance en la información de los funcionarios, Mancera acusó la necesidad de salvaguardar la seguridad de sus funcionarios y sus familias.

Sin embargo, de haber aceptado participar en iniciativas de transparencia como #3de3, cualquier posibilidad de conflicto de intereses por parte de los miembros del gabinete habría sido expuesta sin necesidad de llegar a la destitución.

Aún con las negativas del titular del GDF a transparentar este tipo de información, el mismo asegura que “cuando encuentras algo que no funciona bien, pues lo que tienes que hacer es cortarlo de raíz”, adelantando una amplia posibilidad de que Hernández García no vuelva a la Sobse antes de que sea demostrada su culpabilidad.