El Coro de Madrigalistas de Bellas Artes, este año conmemora 80 años de existencia y los festeja con un concierto en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes.
El programa de esta gala para celebrar el 80 aniversario de su fundación es un fiel reflejo no sólo de su historia sino también de su versatilidad.
Inicia con obras en náhuatl del periodo virreinal de la Nueva España, en los nombres de Hernando Franco, Gaspar Fernández y Antonio de Salazar; esta última, despliega el abanico coral de los Madrigalistas, al ser música antifonal, es decir, escrita para dos coros (ocho voces diferentes).
Crucifixus de Antonio Lotti nos introduce al Barroco. Inspirada en este período, pero con un toque multicoral y aleatorio es Immortal Bach de Knut Nystedt.
Una de las obras emblemáticas del repertorio coral latinoamericano es el ciclo de canciones Indianas del argentino Carlos Guastavino, con brillante acompañamiento del piano. Y con ellas se emprende un recorrido latinoamericano, para disfrutar de algunas de las más bellas canciones de compositores mexicanos como Blas Galindo, Federico Ibarra, Carlos J. Mabarak y Rodrigo Cadet.
En 2012 el compositor estonio Arvo Pärt, fue invitado a visitar México, y para esa ocasión escribió su obra Virgencita, en homenaje a la Virgen de Guadalupe; El broche final, Pregón para una Pascua Pobre, OP.32 del español Rodolfo Halffter (1900-1987) para coro, 3 trombones, 3 trompetas y 3 percusionistas. Un compositor que además dedicó sus famosos Epitafios para el Coro de Madrigalistas de Bellas Artes. |