Para el analista más agudo el elemento que cruza los asuntos que hoy ganan la atención nacional y el señalamiento internacional es el proceso electoral al 2015.
El nuevo Instituto Nacional Electoral, que se estreno con poca fortuna organizando el proceso interno de elección para la renovación de dirigentes del PRD, inició el 7 de octubre el proceso electoral federal 2014-2015 para renovar nueve gubernaturas, integración de la Cámara de Diputados federal, 903 presidencias municipales y 639 diputados locales.
El proceso electoral que llevara a las urnas a los ciudadanos se realizará el 7 de junio del 2015 será “la elección más grande en la historia del país”, ya que coincidirán los comisiones federales con 18 de tipo estatal.
Uno de esos estados es el de Guerrero que hoy atraviesa por una muy difícil situación que amenaza, mueve, conmueve e influye a nivel nacional.
Los últimos días de septiembre y los primeros de octubre ocurrieron hechos que determinan toda la ruta política, a los que se suman otros más que aparecen también como efectos.
La muerte de tres alumnos y la desaparición de otros 43 la noche del 26 de septiembre a manos de policías y criminales quito toda normalidad de una estabilidad tensa.
Los ataques armados que policías municipales y presuntos pistoleros emprendieron la noche del viernes contra alumnos de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa dejó cinco muertos, 25 heridos –uno con muerte cerebral y otros cuatro de gravedad– y 43 desaparecidos.
Los pistoleros y policías se fueron contra un camión del equipo de futbol Los Avispones en la carretera Iguala-Acapulco. El vehículo, de la empresa Castro Tours, se desbarrancó y en él fallecieron el chofer Víctor Manuel Lugo Ortiz y el futbolista David Josué García Evangelista, de 14 años de edad. Un taxista que pasaba por allí resultó herido y su pasajera, Blanca Montiel Sánchez, murió.
Un antecedente del 30 de junio, el asunto Tlatlaya.
El pasado 30 de junio, las 22 personas perdieron la vida durante un enfrentamiento con los militares, se presentaron en una escena que ‘‘fue totalmente manipulada; hubo cuerpos que fueron sembrados y se desaparecieron evidencias.”
Catorce de las 22 personas abatidas por efectivos del Ejército Mexicano en el poblado de San Pedro Limón, en Tlatlaya, estado de México, fueron colocadas a menos de un metro de las paredes de una bodega y los militares les dispararon a corta distancia.
‘‘Para que un impacto de bala de ese calibre (de fusiles M-1) deje un boquete en la pared luego de atravesar un cuerpo, se necesita que se dispare a menos de 30 centímetros de la víctima’’, afirmó el criminólogo José Luis Mejía Contreras al analizar el material fotográfico de la escena del crimen.
Crisis nacional de violación de derechos humanos.
En medio de la situación generada por los dos hechos señalados se tiene una institución defensora de derechos humanos en crisis en el peor momento.
Todo esto acompañado en el cambio del titular de la comisión nacional.
El 24 de septiembre la Cámara de Diputados da entrada a una solicitud de juicio político contra Raúl Plascencia, titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), presentada por organizaciones defensoras por las graves omisiones en innumerables violaciones de garantías fundamentales.
Los estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN) que se oponen al nuevo reglamento interno y a la aplicación de nuevos planes de estudio para algunas escuelas se movilizaron, efectuaron asambleas e hicieron marcharon principalmente del Casco de Santo Tomás a la Secretaría de Gobernación (SG), en donde desde el primer día entregaron un pliego petitorio que busca dar solución al conflicto.
El pliego de demandas, entregado al propio titular de la SG, Miguel Ángel Osorio Chong, de 10 puntos, entre los que se exige la destitución de la directora general del IPN, Yoloxóchitl Bustamante Díez, y la cancelación tanto de los planes de estudios que tecnifican la educación superior como del reglamento aprobado a finales de septiembre.
Desde un principio se movilizaron más de 50 mil politécnicos, tanto de nivel superior como de bachillerato –alrededor de 50 mil, según los organizadores, y 20 mil, dice la policía capitalina, insisten en cada acto–, al responder al llamado de la Asamblea General Politécnica , formada por representantes de todas las escuelas del IPN.
Al acuerdo en la asamblea interuniversitaria del 24 de octubre en la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), se llama a la tercera Jornada Nacional e Internacional de Acción por Ayotzinapa, convocando a un paro nacional del sector educativo para el 5 de noviembre.
