Decisiones de respaldo a funcionarios que no cumplen con sus tareas confunden a la ciudadanía que, a todas luces, da cuenta de la ineficacia y omisión del titular del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, Joel Ortega.
El pasado 8 de septiembre, el legislador local del Movimiento Ciudadano (MC), Cuauhtémoc Velasco Oliva, presentó una denuncia en contra de Ortega ante la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) por ineficacia al cargo en la que esgrimía que “ha vulnerado los derechos a la integridad personal y la movilidad de los usuarios del servicio”. A la denuncia de Velasco se sumó la del panista Orlando Anaya, quien también presentó una denuncia ante los hechos evidentes de explotación laboral de menores al interior de las instalaciones de diferentes estaciones del STC Metro.
Sin embargo, el pasado 18 de septiembre, un día después de presentar su Segundo Informe de Gobierno, el titular del Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, aseguró no tener queja del desempeño del ingeniero Ortega al frente del importante sistema de transporte público.
“No tengo ningún problema con Joel Ortega; ha hecho lo que le corresponde al frente del Metro y mientras siga así conservará su cargo”, señaló tajantemente.
En respuesta a este “espaldarazo” el diputado de MC ha recordado por la mañana de este viernes las nuevas fallas presentadas tan sólo días después de las denuncias presentadas por él y su homólogo del PAN.
Informó que los inconvenientes de con mayor afectación –omitiendo las “pequeñas” fallas que también generan afectaciones- se presentaron los días 11, 13, 17 y 18 de septiembre, justo en el día que Mancera ratificó a Ortega en el cargo.
“Se detallan los hechos ocurridos en la Línea 3, cuando una falla con el cierre de puertas provocó que los usuarios tuvieran que ser desalojados de la estación del Metro Tlatelolco. En otra ocasión, una falla en el suministro de energía en la misma línea afectó la salida de trenes y lo cual requirió el uso de más de 50 unidades de la Red de Transporte de Pasajeros para poder suplir el retraso de casi una hora en el inicio de operaciones.”
Si bien la dirección del STC presentó tres denuncias por supuestos sabotajes que concluyeron en afectaciones severas al servicio, como la detención de éstos, han llegado tarde y sin justificante. Además, se presentaron una vez presentadas las denuncias ante la CDHDF.
Velasco argumentó que la falla enumerada por la dirección del Metro como “corto circuito” en la Línea 1, y que derivó en la suspensión en más de una hora del servicio y la falla no aclarada en la Línea 8 “generó un retraso en todos los trenes de la Línea, sin que se especificará el origen o naturaleza de la misma”.
“No se trata de casos aislados, la situación generalizada de las instalaciones y del servicio del Metro es reprobable y diariamente se pone en riesgo la vida y seguridad de los usuarios”, declaró el. Velasco, quien además aseguró que estas fallas son provocados por omisiones y una negligente actuación por parte de la dirección general del STC Metro y no por la obsolescencia de las instalaciones, como los aseguró el jefe de Gobierno al respaldar a Joel Ortega. |